María Julia Orozco, en representación de un grupo de padres que se organizó para reclamar la vuelta a clases de forma presencial, destacó: “Presentamos una carta redactada por una pediatra quien colaboró en el marco de la salud, en base al marco legal que se está violando al impedir el acceso a la educación. Esta educación a distancia no es posible para todos. Genera una brecha aún mayor.»
Este grupo de padres buscan darle visibilidad al reclamo. Reclaman que se establezca a la educación como una actividad esencial. Consideran que la pandemia afecta a todos pero el impacto en los chicos es enorme. No es una franja etaria que tenga un riesgo en especial. Piden acceso a la educación de escuelas públicas y privadas. El documento está dirigido a todos los que tienen competencia en la materia.
“Estamos armando el amparo en esta jurisdicción. Necesitamos un Estado que brinde una planificación. No puede estar sujeto a la vacuna. No pueden abrir los bares y los casinos y no los colegios. Un adolescente puede ir a tomar una cerveza pero no al colegio. Esto no tiene lógica. ¿Con qué prisma se está mirando la realidad? Invito a los concejales a que recorran las plazas y vean que los chicos están ahí jugando. ¿No van a estar más cuidados en las escuelas con protocolos?”, afirmó esta madre.
Por otro lado, cuestionan el papel de los sindicatos. “Muchos establecieron que hasta que no esté el último docente vacunado no van a regresar. Los docentes tienen vocación, extrañan a sus alumnos y padecen esta conectividad. Ellos también son padres. La posibilidad de abrir las escuelas está. Con organización, todo se puede. Los chicos tienen que estar en los colegios», sentenció Orozco.
Invitan a quienes quieran sumarse al petitorio aún están a tiempo.