En el marco de las reuniones de plenario de comisiones en la Cámara de Diputados, la oposición cercana al oficialismo está buscando reducir el incremento de los Derechos de Exportación (DEX) a las economías regionales propuesto por el Gobierno. La propuesta apunta a que la subida sea del 8% en lugar del 15%, según lo contemplado en la ley ómnibus. Además, proponen que este aumento tenga una vigencia de solo un año. Se espera que el Poder Ejecutivo presente argumentos fiscales que expliquen cómo el aumento de los derechos de exportación contribuirá al 0,42% del PBI.
La oposición, alineada con el oficialismo, está llevando a cabo negociaciones en la Cámara de Diputados para modificar la propuesta de incremento de los Derechos de Exportación (DEX) a las economías regionales presentada por el Gobierno. Su objetivo es reducir la subida del 15% al 8%, según lo planteado en la ley ómnibus, proponiendo además que este aumento sea implementado por un período de solo un año.
Durante las exposiciones de diversos sectores productivos en las reuniones de plenario de comisiones, legisladores opositores expresaron su posición en busca de un equilibrio que considere las necesidades actuales del país. El diputado Beltrán Benedit de La Libertad Avanza (LLA) enfatizó la importancia de buscar soluciones en medio de la compleja situación del país. Destacó que se están escuchando y considerando los reclamos fundados, con la posibilidad de realizar correcciones.
En el contexto de las discusiones, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) solicitó al Gobierno que defina qué economías regionales estarán afectadas por el aumento, ya sea al 15%, al 8%, o si estarán exentas de la alícuota. El diputado Benedit respaldó esta solicitud, considerándola como una medida inteligente para clarificar la aplicación de las retenciones.
Además, se espera que el Poder Ejecutivo presente en los próximos días argumentos fiscales que expliquen cómo el aumento de los derechos de exportación contribuirá al 0,42% del Producto Bruto Interno (PBI). Estas negociaciones reflejan la complejidad de las decisiones económicas y la importancia de encontrar un equilibrio entre las necesidades del Gobierno y los intereses de los sectores productivos.