Los dueños de las funerarias del distrito hace más de tres semanas que comenzaron a preocuparse y ocuparse en buscar un protocolo para la manipulación de los cuerpos de fallecidos por Covid19. Armaron un grupo de whatsapp e intentaron comunicarse de inmediato con funcionarios municipales para ponerse a disposición y lograr tener lo antes posible un protocolo oficial, ya que Provincia no lo tiene aún y a nivel Nacional tampoco existe.
Rodrigo Ponce de León, propietario de una tradicional casa de sepelios de Pilar, contó que agotaron todos los contactos, formales e informales y que nadie respondió los llamados, en el Municipio nadie los escucha. Por lo que decidieron entre todos adoptar el protocolo que oficializó el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires hace unas dos semanas, ya que por su experiencia consideran que es el más adecuado.
Pero el protocolo se debe activar desde el momento en que fallece la persona con coronavirus, o sea en el hospital público o privado, cuando el médico confecciona el certificado de defunción y anota la causa de muerte. Si los resultados del test no llegaron antes del fallecimiento, no estará reflejado en el certificado que están ante un posible caso de coronavirus. Ponce de León dió el ejemplo del servicio que prestaron en el primer caso de muerte por coronavirus en el distrito, donde decidieron esperar los resultados del test para la entrega del cuerpo que permaneció en la morgue.
Los protocolos son indispensables para que todas las personas que intervienen actuen de la misma manera, nadie se encuentre en riesgo de contagio y en estos casos particularmente, respetar y cuidar a la familia con información clara sobre los precedimientos a seguir en un contexto que ya está sobrecargado de incertidumbre.
La imagen es ilustrativa.